El campus central del TEC, en Cartago, una propiedad de 88 hectáreas ha conformado de una red de Corredores Biológicos, para proteger y recuperar zonas de la ecología existente en la zona, dejando un 33% del total del campus, bajo una categoría de conservación, preservación y restauración de ecosistemas locales. Todo este esfuerzo se aúna a las iniciativas de conservación que existen a nivel regional por parte del Ministerio de Ambiente y Energía de Costa Rica, dado que el mismo campus del TEC, se ubica inmerso dentro de un corredor biológico regional que se denomina como “Corredor Biológico COBRI SURAC”, el cual se entiende desde las montañas del Volcán Irazú, cruzando de norte a sur por la ciudad de Cartago, hasta llegar a las zonas protectoras de los ríos Navarro y Sombrero (estribaciones de la cordillera de Talamanca). Actualmente las áreas de conservación del TEC, tienen un reconocimiento de protección por parte de la oficina regional del MINAE en Cartago.
Se han plantado de árboles locales o nativos del Valle del Guarco, macro sector de la ecología local en Costa Rica y sitio donde se ubica el campus central del TEC. Bajo estas iniciativas de trabajos se conforman 6 diferentes áreas de cobertura en trama verde, formando una red de corredores biológicos, que restauran la “infraestructura natural” y hacen una integración armoniosa con las áreas ya construidas, además de ser parte integral del proceso de crear una universidad verde, autosuficiente y des carbonizada. Durante este proceso se han plantado un total de 2266 árboles y para este periodo del 2020, se tiene programado plantar 800 árboles más, en diferentes áreas del Corredor Biológico TEC.
