¡A reforzar las bases y remodelar el edificio!
El rediseño curricular de la carrera integra actividades académicas y reduce el número de cursos
Al igual que una edificación requiere de constante mantenimiento y de ajustes que permitan responder eficientemente a su uso, la Escuela de Arquitectura y Urbanismo está culminando un largo y exhaustivo proceso de revisión de su malla curricular para ofrecerle a su comunidad estudiantil un plan de estudios actualizado, que responda a la demanda de los tiempos y disminuya la sobrecarga académica.
De acuerdo con Dominique Chang Albizurez, docente e investigadora de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo, el rediseño del plan de estudios mejora la experiencia de formación para la comunidad estudiantil en tres aspectos:
- Disminuye la sobrecarga académica.
- Mejora el balance entre áreas académicas para atender las nuevas tendencias en el área disciplinar.
- Brinda una oferta interdisciplinar real de cursos electivos.
En torno a la sobrecarga académica, Chang explica que, con el tiempo, algunos cursos habían aumentado sus contenidos, sin que eso se viera reflejado en la cantidad de créditos y en las horas que se espera que el estudiante dedique al curso. Por ejemplo, los cursos de Laboratorio de Arquitectura de los dos primeros años tenían menos créditos que el resto de laboratorios, sin que existiera evidencia de que la carga académica de aquellos fuera menor.
“La sobrecarga académica es uno de los temas que más afecta la salud mental de los estudiantes. Cuando los créditos asignados a los cursos no reflejan la cantidad real de horas que se espera que un estudiante le dedique al estudio, implica que se limita las horas de sueño y ocio tan necesarias. Esta actualización corrige ese problema de manera que los estudiantes pueden hacer un mejor balance entre las horas dedicadas al estudio, al ocio y al sueño”, resaltó la coordinadora de la Comisión de Actualización del Plan de Estudios.
En relación con el balance de unidades de acreditación en las diferentes áreas académicas, Chang asegura que tuvo una mejora sustancial porque ahora la experiencia de formación se concentra mayoritariamente en el diseño, se aumentó el porcentaje en el área técnica, así como en los temas de ecología y medioambiente.
En este sentido, la actualización contempla un curso electivo en el área de ecología y medioambiente y otro en el área general. De esta manera, cada estudiante decidirá el curso que quiere matricular entre las opciones avaladas por otras escuelas. Por ejemplo, podrá elegir entre matricular el curso de Ecología y Problemática Ambiental de la Escuela de Biología, Costos de la Construcción I, de la Escuela de Ingeniería en Construcción, Sistemas de Información Geográfica de la Escuela de Ingeniería Forestal, o Ciencia Aplicada a la Arquitectura y Diseño de la Escuela de Física.
“Esto le brinda una oportunidad que, si bien existía en la reglamentación del TEC, aún no se había implementado. Seremos la primera carrera en implementar la interdisciplinaridad de esta manera. Esto está directamente relacionado con el perfil de salida, los arquitectos suelen desarrollar su vida profesional en equipos interdisciplinarios”, subrayó Chang.
Entre los cambios, destaca la oferta de nuevos cursos. Tres de ellos tienen el objetivo de fortalecer el área de Ecología y Medioambiente: Diseño Bioclimático, Habilitación de Sitio y Paisajismo y el curso electivo ambiental que se detalló anteriormente.
Otra modificación significativa es que el Trabajo Final de Graduación ahora se hará posterior a la culminación completa de los cursos y créditos del plan de estudios, en lugar de realizarlo en conjunto con los últimos cursos de la carrera, como se solía hacer con la versión anterior del plan. Este cambio sigue los estándares internacionales de la Unión Internacional de Arquitectos y no redundará en una ampliación de la duración de la carrera.
El rediseño curricular de la carrera de Arquitectura y Urbanismo contempla un plan de transición que se está socializando con toda la Escuela, con el fin de que cada estudiante analice las ventajas y desventajas de continuar con el plan que inició su carrera o migrar al plan actualizado. Una vez tomada su decisión, realizará un compromiso de transición que conlleva una serie de condiciones.
Tanto el plan de estudios original como el actualizado cuentan con la acreditación del Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (Sinaes). En esta línea, Chang apuntó que la carrera mantiene el compromiso real de la mejora continua y recordó que este año se efectuará la evaluación de los avances de cumplimiento de los compromisos de mejoramiento, entre los cuales figura la implementación de la actualización del plan de estudios.
“Si fuera un simple cambio de nombre de los cursos, el proceso hubiese sido mucho más rápido y los cambios mucho menos significativos. Este rediseño ha sido un proceso que ha requerido el esfuerzo de muchas personas y que cuenta con todos los avales institucionales, iniciando con los de otras Escuelas que imparten cursos en nuestro plan de estudios, el Centro de Desarrollo Académico, el Consejo de Docencia y el Consejo Institucional.”
- Dominique Chang Albizurez, docente e investigadora de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo
Para Jeannette Alvarado Retana, directora de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo, el rediseño del plan de estudios beneficiará a la comunidad estudiantil porque tendrá una formación balanceada, actualizada e integral en las diferentes áreas de la arquitectura, la cual les permitirá construir conocimiento y desarrollar habilidades y competencias para el diseño de espacios de acuerdo con los avances de la ciencia y la tecnología, las necesidades de la sociedad y la realidad laboral.
“El rediseño de plan de estudios debe verse de una manera integral en donde se abordan distintas aristas, entre las que se encuentra el Perfil Académico Profesional que cuenta con doce capacidades o rasgos. La actualización realizada en los cursos aporta al fortalecimiento de esas capacidades en la formación de profesionales líderes, críticos, comprometidos con el desarrollo arquitectónico y del territorio, con la sociedad, la sostenibilidad y la aplicación de la investigación en distintos procesos creativos y de innovación apropiada en los diferentes ámbitos de ejercicio profesional”, puntualizó Alvarado.
Por su parte, José Mena Marenco, presidente de la Asociación de Estudiantes de Arquitectura y Urbanismo, considera positivo el rediseño del plan de estudios porque se pone al día con las nuevas tendencias y se incluyen conocimientos que está exigiendo el mercado laboral. Además, agradece la disminución de la carga académica, lo cual permitirá que el estudiante no se recargue demasiado y pueda enfocarse en ciertos cursos claves.