Un nuevo producto ya está a la venta para acelerar la descomposición de residuos orgánicos y controlar los malos olores.

Se trata de Bio-Degra. La nueva tecnología desarrollada por científicos del Centro de Investigación en Biotecnología (CIB), del Tecnológico de Costa Rica (TEC), en colaboración con la empresa privada Coopetarrazú. 

"En el TEC podríamos realizar ciencia básica nada más, pero nosotros tenemos una característica y es que hacemos ciencia aplicada. Para ello contamos con las industrias, las empresas y los productores como campo de aplicación. En efecto, este trabajo pudimos haberlo hecho a nivel teórico, pero nosotros hacemos simulaciones, prototipos, etc; porque repito, en el TEC no solo se genera conocimiento sino que se genera aplicación", afirmó el científico William Rivera. 

De esta manera, si bien es cierto, ya existen productos en el mercado que descomponen residuos orgánicos y controlan olores, con Bio-Degra se está frente a una nueva tecnología con cinco mejoras específicas:

1- Puede durar hasta año y medio almacenado 

Los productos que se someten a procesos tecnológicos innovadores, como estos, tienen una ventaja de comercialización y es que la vida útil del producto se extiende. 

"De esta manera, los productos artesanales que están en actualmente en el mercado pueden soportar, como máximo, un mes sin refrigeración; pero Bio-Degra es capaz de durar hasta año y medio sin necesidad de refrigerarlo", explicó el científico. 

Esto no solo beneficia al usuario, sino que también a la Cooperativa, ya que le permite comercializarlo a gran escala y lejos de la zona de dónde se produce, "Ya que Bio-Degra tiene mucha vida de anaquel", insistió. 

2- Durante su vida útil no va producir malos olores 

Otra de las mejoras es que durante su año y medio de vida útil, no se va a descomponer, no va a producir malos olores, ni a liberar gases explosivos (las cuales son condiciones normales que tienen los actuales productos de fermentación).

3- Puede ser utilizado en todo tipo de materia orgánica

Bio-Degra fue pensando, en un inicio, para acelerar la descomposición de la broza del cultivo del café.

Así por ejemplo, solo Coopetarrazú realiza un compostaje de 30.000 toneladas de pulpa del café durante la cosecha. 

Sin embargo, esta nueva tecnología puede ser utilizada sobre cualquier tipo de materia orgánica. 

"Puede ser utilizado en residuos de arroz, piña, melón, sandía, caña de azúcar, vegetales, etc. En resumen es posible aplicarlo en los grandes cultivos de productos de exportación del país y los cultivos de consumo interno", indicó el Investigador. 

Rivera también agregó que el producto es capaz eliminar malos sistemas en cañerías, sistemas de desagües, trampas de grasa e incluso en los tanques sépticos de los servicios sanitarios de las casas. "Coopetarrazú creo que no pensó sobre estos últimos enfoques, pero nosotros dentro del Centro de Investigación ya lo probamos y lo validamos. Entonces, según nuestras investigaciones, se puede usar y funciona bien".   

4- Ahorro de dos semanas del tiempo total del proceso de descomposición

Finalmente, el "cóctel" de microorganismos que contiene es capaz de ahorrar, en dos semanas, el proceso de degradación normal de la materia orgánica en los patios. Un tiempo vital para grandes productores de café o piña, entre otros. 

"Esto conlleva a un beneficio adicional, que es la reducción de las emisiones gaseosas, líquidas y los olores malos durante la descomposición", señaló Rivera.  

5- Mejora la calidad del abono orgánico

Para Coopetarrazú, una de las mejoras que tiene Bio-Degra es que una vez finalizado el proceso de descomposición, todo el material va a volver a las fincas como un abono orgánico de alto nivel. 

"Es decir, el producto que surja del compostaje va a regresar a las fincas a devolver nutrientes", comentó el gerente de Investigación, Desarrollo e Innovación de Coopetarrazú, Jimmy Porras.