“Caballero en la Orden de las Palmas Académicas”. Ese fue el título que recibió la noche del jueves 29 de noviembre el doctor Julio César Calvo, rector del Tecnológico de Costa Rica (TEC).

El Gobierno de Francia designó con este altísimo honor al Rector  por sus aportes en la investigación científica para la conservación y el desarrollo sustentable de los recursos naturales y por el fomento de las relaciones académicas entre ese país europeo con Costa Rica y América Central.

Entre algunas de las acciones que le valieron este honor, el embajador Thierry Vankerk-Hoven mencionó el motivar una política de formación de doctores en universidades de Francia en áreas de ciencia y tecnología, promover el aprendizaje del idioma francés en la comunidad de profesores y estudiantes del Tecnológico, impulsar un acercamiento y una homologación de calidad en la gestión para las universidades centroamericanas.

Asimismo, el reconocimiento de grados y títulos entre Francia y Costa Rica y la oportunidad para el desarrollo de investigación y otras acciones académicas en forma conjunta, como ejemplo las titulaciones dobles y la el desarrollo de proyectos de investigación con el Instituto Pasteur. 

Además, el máximo representante diplomático de Francia en Costa Rica, destacó como “una iniciativa sin precedente en toda Latinoamérica” el trabajo del rector  en el logro de la acreditación institucional del TEC por parte del Alto Consejo de Evaluación de la Investigación y la Educación Superior (Hceres en sus siglas en francés).

De igual manera, Vankerk-Hoven resaltó la siempre inclusión del tema ambiental en todas las investigaciones realizadas por Julio César Calvo. “Durante su labor contempla el cuidado de la naturaleza de manera científica y sustentable. Es imperativo cuidar la flora y fauna y él siempre contribuye a la difusión de conocimientos fundamentales para la gestión de nuestros recursos y la salvaguardia del planeta”, aseguró.

Al recibir la condecoración de la Orden de las Palmas, Calvo –quien es Rector de la Institución desde 2011- se dirigió a un público conformado principalmente por funcionarios y representantes estudiantiles del TEC. Sus emocionadas palabras se enfocaron en la importancia del reconocimiento y el honor que significa para él. Además, alabó a Francia y la importancia que tiene ese país para el mundo entero. 

“La Orden de las Palmas Académicas me hace igualmente pensar en toda la fuerza propulsora de la Francofonía que irradia por todo el planeta. Me hace pensar en la crisis política actual que enfrenta el mundo con el advenimiento del populismo, la post-verdad y la negación de las evidencias científicas, que estremecen a muchos países, que ponen en riesgo la paz, el humanismo y la estabilidad ecológica del planeta.  No es coincidencia que el Presidente de Francia Macron, sea el insigne líder europeo y mundial que apela al multilateralismo y a los valores más altos en medio de la confusión que otros han generado sin clemencia alguna en contra de la paz, la democracia, el desarrollo humano y a cada uno de los objetivos del desarrollo sostenible de las naciones unidas”, comentó el Rector.

Calvo también agradeció a todos los funcionarios del TEC por ser parte del trabajo que le permitió obtener esta mención, a la que cataloga como gran reconocimiento a la comunidad TEC por su compromiso con el desarrollo integral del país.

La condecoración de la Ordre des Palmes Académiques es una de las cuatro distinciones ministeriales que entrega anualmente el Gobierno de Francia a distinguidos ciudadanos del mundo.  Representa un honor para las personas que se destacan por sus acciones en cultura y la educación. Tiene sus raíces en 1808 y fue reestablecido desde 1955. Se asigna en los grados de comendador, oficial y caballero.