Pronto, los cantones de Abangares, Bagaces, La Cruz, Puntarenas, Poás y Sarchí, así como la intendencia de Colorado, contarán con propuestas de diseño de nodos urbanos de bienvenida para sus visitantes, gracias al trabajo que está desarrollando toda la comunidad estudiantil y docente de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo del TEC en la XIX edición del Taller Vertical.

Esta iniciativa académica anual integra a todo el estudiantado y al cuerpo docente de forma intensiva, durante toda una semana, para generar propuestas e intervenciones puntuales que respondan a necesidades específicas en temas arquitectónicos de las ciudades.

Para este año, se seleccionó el lema “Habitando nuestra identidad” porque el ejercicio académico se centrará en el fortalecimiento de la identidad local y realizará propuestas de intervención que, más allá de ser un rótulo estandarizado con el nombre del centro urbano, sea una respuesta espacial arquitectónica y urbana de bienvenida que refleje la autenticidad cultural de la población.

Para ello, más de 200 estudiantes de la carrera de Arquitectura y Urbanismo del TEC se distribuirán en 14 equipos de trabajo para investigar a profundidad la identidad de cada región y proponer diseños para las siete comunidades. En este proceso estarán acompañados por docentes, agentes sociales, invitados especiales y personal del Centro Municipal de Urbanismo Social (Cemus), de la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI).

Katherine Díaz Picado, estudiante de nuevo ingreso a la carrera, destacó que el XIX Taller Vertical es una oportunidad para aprender de las personas que están en grados mayores y que la ayudará a potenciar sus habilidades. Mientras tanto, Gabriel Palomo Naranjo, quien también hace su primer año en Arquitectura y Urbanismo,  se manifestó nervioso y expectante por este ejercicio académico, el cual le permitirá obtener nuevos aprendizajes y vivir experiencias novedosas.

Por su parte, José Mena Marenco, presidente de la Asociación de Estudiantes de Arquitectura y Urbanismo, hizo suyas las palabras de la arquitecta chilena Olga Segovia, quien cree que el cambio de los espacios no solamente transforma su entorno, sino que cambia la forma en la que sus habitantes conviven y crean un sentimiento de orgullo por los lugares donde residen.

“Esta edición del Taller Vertical es importante porque tenemos la oportunidad de extendernos por varios puntos del territorio nacional y no únicamente solucionar una necesidad de un lugar en específico. Tenemos el gran reto de diseñar arquitectura que no solamente describa, sino que fortalezca la identidad de los habitantes de cada cantón e intendencia y que puedan apropiarse de este espacio”, recalcó.

El Cemus, junto con las seis municipalidades y la intendencia involucradas en el proyecto, han desarrollado cinco ejes de trabajo, entre los que destacan la recuperación de los espacios públicos, la apropiación de la identidad local y la identificación de elementos diferenciadores de cada localidad. Esta información surgió a partir de procesos participativos con la ciudadanía, en los que se expusieron las necesidades y expectativas de los habitantes y ahora será el principal insumo con el que el estudiantado desarrollará sus propuestas.

José Pablo Bulgarelli Bolaños, coordinador general del XIX Taller Vertical, destacó que la Escuela de Arquitectura y Urbanismo siempre ha tenido la intención de vincularse con otros ambientes. En este sentido, considera que el convenio recientemente firmado entre el TEC y la Asociación Nacional de Alcaldes e Intendentes (ANAI) es una muy buena oportunidad, porque las alcaldías e intendencias con las que se trabajará tienen otras necesidades totalmente diferentes a las que hay en el Gran Área Metropolitana.

“Queremos que los espacios públicos se utilicen. Queremos que estos nodos de bienvenida sean espacios para la convivencia, tanto de los locales como de los visitantes con los locales, y que los visitantes nos demos una idea de qué nos vamos a encontrar en ese territorio. Entonces, va más allá de simplemente rotular el nombre de la comunidad; se trata de que sea ese punto de encuentro de locales y visitantes”, subrayó Bulgarelli.

Por su lado, Jonathan Espinoza Segura, director ejecutivo de ANAI, agradeció la iniciativa del TEC de construir en conjunto con las comunidades en un momento en el que la gente ha empezado a asociar el problema de la inseguridad con la ausencia de espacios públicos. En esta línea, invitó a la comunidad estudiantil a sensibilizarse en torno a las necesidades de cada localidad y a realizar propuestas basadas en evidencias. Asimismo, recordó que todos los diseños serán llevados a la intendencia y a los municipios involucrados para valorar su realización, lo que podría convertir una experiencia académica en una realidad urbana.

Mientras tanto, Jeannette Alvarado Retana, directora de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo, recordó que el Taller Vertical nació con el propósito de “hacer Escuela”, lo cual ha traído espacios de convergencia, de aprendizajes y de extensión a la sociedad costarricense, con retos que implican la resolución de problemáticas y el abordaje de oportunidades que contribuyen al desarrollo integral del país por medio de la excelencia académica.

El Taller Vertical se inauguró el 13 de marzo en el auditorio del Tribunal Supremo de Elecciones, con una charla sobre urbanismo social a cargo de Gilberto Monge, exalcalde del cantón de Mora y quien es abogado y especialista en el tema. También se contó con la participación de Carlos Hernández, arquitecto y exdirector de la Dirección de Proyectos del Espacio Público en el ayuntamiento de Guadalajara, México.

De acuerdo con el cronograma de trabajo, los equipos estudiantiles se reunirán de forma virtual con agentes sociales de los territorios durante dos días consecutivos con el fin de profundizar en la comprensión de la tarea. Estas sesiones se acompañarán de charlas sobre temas relacionados con la temática del Taller. Posteriormente, los grupos de trabajo se concentrarán en terminar sus propuestas, las cuales deben presentarse el viernes 17 de marzo a medio día.

Los diseños de las propuestas deberán cumplir con los siguientes criterios:

1. El proyecto debe ser realizable y de bajo costo en todo su ciclo de vida, desde su diseño hasta su construcción. También debe contemplar bajo mantenimiento y alta durabilidad.

2. La propuesta deberá estar ligada a una visión ambiental sostenible y de aprovechamiento de los recursos naturales locales.

3. El proyecto debe ser habitable y seguro. Para ello debe contemplar el mobiliario apropiado, en especial la iluminación.

4. La propuesta debe integrarse con la red de espacios públicos del contexto. También debe ser accesible peatonalmente y contemplar la movilidad activa.

5. El espacio proyectado debe reflejar la identidad cultural del contexto local y permitir la inclusión social.

6. El nodo urbano que se proponga debe generar la empatía de la población local y de sus visitantes. Es decir, debe ser icónico y facilitar las condiciones urbanas para que las personas deseen tomarse fotografías y compartirlas en sus redes sociales.

El premio a los tres equipos ganadores consistirá en participar activamente en el proceso consultivo del anteproyecto y de los planes constructivos de sus propias propuestas, luego de que estas superen un proceso de evaluación de su factibilidad constructiva y se demuestre su viabilidad. Adicionalmente, los miembros de cada grupo estudiantil recibirán un descuento del 90 % en uno de los cursos del proyecto Cursos de Capacitación en Arquitectura, por impartirse entre el 2023 y 2024.