Con el objetivo de fortalecer el nivel en el dominio del idioma inglés de los funcionarios y estudiantes de las universidades públicas, el Consejo Nacional de Rectores (Conare) inició desde el año 2008, un programa en los centros de enseñanza estatales que lo conforman.  Y en el caso del Tecnológico de Costa Rica (TEC), saca buena nota.  

Dicho sistema se trabaja de manera bimestral por medio de 15 módulos de 32 horas cada uno. El programa “Conare Fortalecimiento del Inglés” se imparte en la Sede Central de Cartago, el Centro Académico de San José, el Centro Académico de Alajuela y la Sede Regional de San Carlos.

Según la máster Silvia Usaga, docente de la Escuela de Ciencias del Lenguaje y coordinadora del programa Conare Fortalecimiento del Inglés, los resultados del TEC destacan a nivel nacional. “Con respecto a la prueba de certificación de nivel de dominio del inglés, que está a cargo de la Universidad de Costa Rica (UCR), el TEC obtiene excelentes resultados.  La mayoría de los estudiantes se ubican en los perfiles B2 y C1 de acuerdo con el Marco Común Europeo y en concordancia con los objetivos del Programa”, explicó Usaga.

El número de personas favorecidas con este método en la Institución fue de más de 400 por bimestre en el 2015. Así se destaca el crecimiento, ya que en el 2008 en el mismo período asistía un promedio de 165.

Las lecciones se dan de manera semanal todos los lunes y viernes, se combinan tanto horas presenciales como fuera de clase. Los estudiantes realizan actividades como prácticas, tareas y proyectos. Los horarios dan la posibilidad de estudiar en la tarde o en la noche, esto con el fin de no provocar choque con los cursos TEC y así evitar posibles retiros.

Desarrollo de habilidades

Los estudiantes pertenecientes a este Programa desarrollan sus destrezas en producción escrita y oral, comprensión auditiva y comprensión de lectura de nivel elemental a nivel avanzado.

Otras de las actividades desarrolladas en el marco de este programa son las capacitaciones en el uso de tecnología y el aprendizaje invertido, las cuales han mejorado su calidad. De la misma manera, la inversión en equipo y capacitación también beneficia a los estudiantes de otros programas que se desarrollan en la Escuela de Ciencias del Lenguaje.

Con respecto al futuro de este Programa, se busca darle seguimiento y abarcar cada vez más estudiantes. “Esperamos que continúe y se fortalezca, alcanzando a una mayor población”, concluyó Usaga.