La forma en que los padres perciban a la matemática influirá en el rendimiento de su hijo en esta materia. Es decir, si un papá, por ejemplo, le dice a su hijo que la materia es dificil,  él creerá que lo es.

Así quedó demostrado en una investigación denominada: “Actitud hacia la matemática, percepción de la actitud del padre hacia la matemática y percepción de la actitud de la madre hacia la matemática” , elaborada por la estudiante Jimena Sanabria de la carrera de Enseñanza de la Matemática Asistida por Computadora (EMAC) del Tecnológico de Costa Rica (TEC).

El estudio de Sanabria  se trata de una investigación cuantitativa de tipo descriptiva y reveló que el 67.3% de los estudiantes tiene un nivel de percepción alto o muy alto hacia las matemáticas, cuando las madres los motivan.

Mientras que también quedó demostrado que el 74.1% de los alumnos tiene una percepción alta o muy alta, cuando es el papá quien motiva a su hijo y no le dice que las matemáticas son difíciles.

Es por ello, que de acuerdo con la investigadora es vital que haya una comunicación constante entre padres de familia y docentes. Además, el resultado sugiere que cuando  los estudiantes sienten que sus padres los apoyan bastante en el desarrollo del aprendizaje de matemática, influye en la actitud propia que tiene el alumno hacia esta materia.

El estudio lo  realizó Sanabria  en el 2015 a estudiantes de los colegios: Francisca Carrasco Jiménez, San Luis Gonzaga y Experimental Bilingüe, todos ubicados en Cartago.  Con esta investigación, ella optó por el grado de licenciatura de la carrera de Enseñanza de la Matemática Asistida por Computadora.

Entre los resultados, también se encontró que el33.9% de los estudiantes tiene un nivel alto o muy alto de actitud positiva hacia la matemática. Además, las mujeres tienen, en promedio, una actitud favorable  hacia la matemática en comparación con los hombres, lo que concuerda con hallazgos de otras investigaciones, tanto nacionales como extranjeras, señaló Sanabria.

“Una actitud positiva del estudiante hacia la matemática le permite desarrollar un proceso de aprendizaje adecuado, por lo que, en conjunto: institución, docentes, padres y madres, deben trabajar para fomentar actitudes positivas hacia esa materia”, afirmó. 

Sanabria indica que sí existen diferencias de actitud hacia la matemática entre diferentes años de secundaria, pero  la investigación no determina quienes tienen mejor o peor nivel de actitud.

La investigadores recomienda que se realicen constantes actualizaciones de los docentes, en cuanto a métodos y técnicas, de la mano con los programas actuales, que promuevan la enseñanza y el aprendizaje de la matemática y que al mismo tiempo, fomenten mejores actitudes hacia la disciplina.

“La importancia de este tipo de investigaciones radica, en primer lugar, porque genera insumos valiosos en la formación de profesores de matemática mediante la carrera de EMAC y en segundo lugar, porque identifica variables susceptibles de intervención en procura de mejorar los procesos de enseñanza y de aprendizaje de la matemática en la educación secundaria

 “En tercer lugar, dota a las autoridades del  Ministerio de Educación Pública (MEP), y a los docentes en ejercicio, del conocimiento del contexto nacional, lo cual favorece la adopción de medidas tendientes a mejorar los procesos educativos. Estas investigaciones tienen el mérito también de permitir que el TEC contribuya al mejoramiento de las condiciones de vida del pueblo costarricense, tal como plantea uno de los fines institucionales consignado en el Estatuto Orgánico”, concluyó el Dr. Luis Gerardo Meza Cascante, director de la tesis.

Dicha investigación fue expuesta al jurado conformado por el doctor Meza, director de la tesis; el licenciado Paulo García Delgado, coordinador de la Carrera Enseñanza de la Matemática asistida por Computadora; la licenciada Marcela Marrero Calvo, lectora; el licenciado Marcial Cordero Quirós, lector y el máster Alcides Astorga Morales, representante del Director de la Escuela de Matemática.