Fue a finales del primer semestre del 2018 cuando la vida les presentó una oportunidad de desarrollo estudiantil en el extranjero a dos jóvenes alumnos de la carrera de Ingeniería en Computadores del Tecnológico de Costa Rica (TEC).

Jonathan Rojas y Sergio Vargas se enteraron a mediados de año de que habían sido seleccionados para ser parte de una pasantía en el Laboratorio Centro Investigación AMES, instancia que pertenece nada más y nada menos que a la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio, mejor conocida como NASA.

Ubicado en Silicon Valley, este espacio sirvió como sede para que durante tres meses, los estudiantes trabajaran un proyecto llamado “Astrobee”. El mismo consistió en el desarrollo de un robot asistente que será enviado a la mismísima Estación Espacial Internacional a inicios de 2019 con el objetivo de ayudar a la tripulación en distintas labores.

Monitoreo de la calidad del aire y de ruido, control de inventario y documentación en vídeo del trabajo de los astronautas son parte de las tareas que realizará este dispositivo autónomo por medio de sus cámaras, brazo hidráulico y propulsores integrados.

El aporte de los estudiantes TEC consistió puntualmente en brindar soporte a la plataforma que maneja al robot. Además, trabajaron en un laboratorio de microgravedad para simular la situación real en la que funcionaría la herramienta y así probar todos los movimientos que haría el robot en la Estación.

También, recibieron capacitación en procedimientos de seguridad, entrenamientos en manipulación de recursos tecnológicos y talleres sobre aspectos técnicos.

Sobre la manera en la que vivieron esta experiencia, tanto Jonathan como Sergio aseguraron que fue muy importante el aprendizaje obtenido durante su carrera en el Tecnológico. “Aprender por uno mismo, la proactividad y trabajar con esfuerzo fueron algunas de las habilidades que habíamos adquirido durante nuestro paso por las aulas del TEC y que nos fueron más valiosas en Estados Unidos”, coincidieron.

Tras regresar al país, recientemente los estudiantes presentaron lo desarrollado en esta oportunidad como su trabajo final de graduación. Ambos lo lograron aprobar sin problemas y ahora se encuentran a la espera de graduarse el año entrante y luego buscar integrarse al mercado laboral.

Finalmente, y como mensaje de motivación a los actuales estudiantes de la Institución, tanto Sergio Vargas como Jonathan Rojas aseguran que para todos es posible soñar con vivencias académicas y profesionales de este tipo. “Cuando medimos nuestro nivel en esta experiencia, nos dimos cuenta de que la capacidad de los profesionales costarricenses es muy amplia y que estudiar en el TEC definitivamente abre puertas para ser parte de oportunidades así”, concluyeron.