La Oficina de Comunicación y Mercadeo no toma como suyas, las opiniones vertidas en esta sección.
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Quizá sea pronto, sí, demasiado pronto para hablar de la elección del próximo Rector del Tecnológico de Costa Rica.  Sin embargo, sabemos que el tema se discute en pasillos y reuniones informales de grupos que especulan y barajan algunos nombres que “flotan” en el ambiente Institucional.  Y digo “flotan” porque aterrizar con este tema parece que es bastante difícil en nuestro campus.  De todos modos, me permito manifestar algunas apreciaciones, muy personales, sobre lo que creo debe ser un proceso de elección de Rector, que comprende tanto las respectivas etapas formales, establecidas por el Tribunal Institucional Electoral, como las etapas informales que se asoman tímidamente en el acontecer diario del TEC.

Nuestra universidad no se ha caracterizado precisamente por formar líderes de opinión, son muy escasos los ejemplos tanto en el sector estudiantil como entre los funcionarios, y eso es un síntoma, quizá, del desinterés o de la falta de conocimiento sobre temas que atañen directamente a la universidad, o bien, al acontecer nacional o internacional.  Parece que somos demasiado tecnócratas para opinar sobre lo que sucede a nuestro alrededor.  Pero, quienes deseen dirigirnos, deben opinar…

En este sentido, yo esperaría que, desde ya, aquellas personas que han manifestado de manera informal su interés en la Rectoría, y aquellas que lo hagan en un futuro cercano, inicien un proceso de expresión pública de sus ideas y pensamientos sobre temas que nos impactan como: el déficit fiscal y su repercusión en el presupuesto universitario, la siempre manoseada autonomía universitaria, la realización del IV Congreso Institucional y sus implicaciones en el futuro del TEC o la participación que podemos tener como universidad en la búsqueda de soluciones a los problemas naciones.  No, si temas hay muchos de los que hablar y opinar… Y no se trata de que den las soluciones mágicas a estas situaciones, se trata más bien de que den a conocer, por los diferentes medios que pone a su disposición la Institución, su pensamiento y su visión a futuro sobre esta universidad.  Esto nos ayudará, desde ya y no solo en campaña, a conocerlos más profundamente y con ello tomar decisiones más acertadas sobre quienes dirigirán los destinos de esta Institución a partir del año 2019.

Cada administración, o cada Rector que ha tenido esta universidad se ha caracterizado por enfocar su gestión hacia diferentes aspectos, que van desde el enfoque humano y el fortalecimiento de la investigación hasta el desarrollo de la infraestructura.  El TEC está en un proceso de consolidación y se acerca a celebrar su 50 aniversario, por ello es menester que el próximo Rector sepa leer el contexto, tanto interno como externo, en el cual estamos inmersos para que esta institución sea más pertinente a las demandas de una sociedad cada vez más compleja y cambiante.

Hemos recorrido un largo y exitoso camino, pero el futuro que nos espera es mucho más amplio y retador.  A futuro requerimos autoridades que aporten pensamientos innovadores, que tengan una visión global de la universidad, que potencien el Recurso Humano como nuestro mejor activo y que realicen una gestión transparente y de resultados que impacten en el desarrollo científico y tecnológico de Costa Rica.  Es por eso que, desde ya, nuestra comunidad merece tener más argumentos para saber quiénes se van amoldando a ese perfil de Rector que requerimos para ser la mejor universidad en ciencia y tecnología del país y de la región.