Con el diseño de una casa ligera para el trópico costarricense y con menor impacto ambiental que una vivienda de concreto, Ricardo Villalobos Vargas, estudiante de Arquitectura y Urbanismo [2] del Tecnológico [3], obtuvo el segundo lugar en el certamen convocado por la empresa USG Arquitectura, firma estadounidense con presencia en América Latina que se especializa en la fabricación y comercialización de productos livianos para la construcción.
En el concurso participaron 300 estudiantes de Arquitectura de Guatemala, Panamá y Costa Rica, quienes recibieron una capacitación teórica y práctica previa a la competencia. El primer lugar lo obtuvo Ana Francini Solís, estudiante de Arquitectura de la Universidad de Costa Rica [4], mientras que el tercer lugar quedó en manos de un estudiante guatemalteco.
Para Villalobos, estos resultados hablan claramente de la calidad educativa del país y, específicamente de las universidades públicas costarricenses. “Este premio es una validación de todo lo que he aprendido, no solo técnico, sino estético; todo lo que lleva hacer un proyecto. Estoy superfeliz de terminar así la carrera porque estas son oportunidades que uno tiene que ir agarrando”, mencionó.
El joven explica que el jurado calificador se centró en analizar dos elementos de cada proyecto presentado: el diseño junto con la estética y la viabilidad técnica. En este sentido, se evaluó el cumplimiento de los requisitos, la disposición de los espacios y el uso certero y conveniente de los materiales que ofrece la empresa.
“Creo que el elemento diferenciador en mi proyecto fue pensar en el contexto. No solo me preocupé de que el proyecto se viera bien, sino que proyecté una casa de acuerdo con el contexto costarricense y la manera en que podía utilizar los productos de la empresa en el entorno nacional. Así que tropicalicé el uso de los materiales de la empresa y procuré un diseño atractivo estéticamente”, detalló Villalobos.
El diseño presentado por Villalobos se denomina “Casa Arenas”, mide 120 metros cuadrados e incluye tres habitaciones y un área social. Se trata de una casa unifamiliar pensada para el trópico costarricense y que tiene un menor impacto ambiental que una vivienda construida con concreto, al utilizar materiales mucho más livianos en sus paredes y cielos. Para Villalobos, esta característica de los materiales de USG Arquitectura es sumamente ventajosa, porque el proceso constructivo es más fácil y rápido, así como su manutención.
El proyecto incluyó los planos, la renderización (modelos 3D) y la especificación técnica, porque cada pared de la vivienda tenía que justificarse de acuerdo con las necesidades del espacio y el ambiente.