El asentamiento Erizo Juan Santamaría ya aparece en los mapas, con calles y alamedas que tienen nombres oficiales elegidos por los propios habitantes de la comunidad.
Gracias al apoyo del Laboratorio Experimental (LabExp) [2], del Centro Académico de Alajuela del TEC, las personas que habitan este barrio ya pueden pedir un servicio de reparación a domicilio, dar una dirección o reclamar mejoras a políticos y tomadores de decisiones en el cantón.
“Antes nos distinguíamos diciendo la entrada, la subida, la cuesta, la vuelta... Ahora sabemos que cada entrada tiene nombre”, cuenta Jessica Pérez en uno de la serie de videos que retratan el proceso [3].
Con el proyecto de extensión se mapeó el asentamiento, utilizando el software libre llamado Open Street Map. Además, se desarrolló un proceso democrático para elegir los nombres de las calles y alamedas, y se colocaron los rótulos de las mismas.
La Comisión Nacional de Nomenclatura aprobó los nombres elegidos por los habitantes, gracias a una iniciativa respaldada por el Concejo Municipal de Alajuela.
“Así, si alguien nos visita, puede identificar cada entrada por los nombres de cada rótulo”, comenta Carol Rodríguez.