Según el Rector, el TEC volvió a la presencialidad tras evaluar tres situaciones:

Primero, que la docencia remota impedía a los jóvenes tener una vida universitaria, reduciendo el desarrollo de las capacidades sociales. 

Segundo, que el TEC ofrece muchos servicios estudiantiles (entre ellos laboratorios, bibliotecas y espacios deportivos), pero al estar en casa, los jóvenes no pueden acceder a ellos. 

Y tercero, que más del 90% de la población estudiantil del TEC, que va entre los 18 y 35 años, ya cuenta con la segunda dosis de la vacuna contra la covid. 

En la actualidad, el 9% de los grupos quedó en clases semipresenciales, el 11% en virtuales y el 1% en docencia remota. 

“Particularmente algunos cursos de docencia remota se mantuvieron en Alajuela por las condiciones que actualmente tiene el Centro Académico y que no permiten el retorno a la presencialidad”, concluyó.

¿Qué opinan los estudiantes?

“Estamos muy contentos, porque en el colegio también tuvimos dos años de virtualidad, así que en este primer semestre no sentí mucho la diferencia. Pero hoy me siento completamente diferente, incluso en la parte académica se entiende mejor la materia”, afirmó Kendell Garbanzo, estudiante de la carrera de Ingeniería en Computación. 

“Además, podemos socializar más y conocer en persona a los compañeros”, agregó Carlos Venegas, también estudiante de Ingeniería en Computación. 

En relación con el uso de la mascarilla, desde mayo de este año la Rectoría anunció que el uso de la mascarilla dentro de los campus y centros académicos sería voluntario, excepto en lugares cerrados, donde es obligatorio. 

Desde el 20 de octubre del año anterior, la Rectoría estableció la obligatoriedad de la vacuna contra la covid-19 para todos los funcionarios del TEC, exceptuando a aquellos que por prescripción médica avalada por la Clínica de Atención Integral de Salud (CAIS), no sean aptos para recibir ninguna de las vacunas disponibles en el país.