Un espacio de discusión y articulación de universidades de la región centroamericana fue lo que se vivió en la más reciente edición del Congreso Universitario Centroamericano.
Con sede en Tegucigalpa, y como anfitriona la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), la novena edición del Congreso sirvió como plataforma de encuentro para unas 3500 personas que participaron en este evento realizado entre el 16 y 17 de junio.
Mediante siete mesas temáticas de discusión desarrolladas como parte de la dinámica del Congreso, se presentaron un total de 143 ponencias que permitieron tener un espacio de intercambio de visiones, reflexión y debate sobre el futuro de la educación superior. Además, se logró identificar las nuevas áreas prioritarias, objetivos estratégicos y líneas de acción para el trabajo conjunto de las universidades públicas de la región en los próximos años.
El evento desarrolló, asimismo, diversas conferencias temáticas en la plenaria del Congreso con el fin de contribuir a la construcción de una agenda temática regional de mediano plazo para la educación superior centroamericana, así como para evaluar y revisar el IV Plan de Integración Regional de la Educación Regional.
La actividad reunió no solo miembros de las universidades de Centroamérica y República Dominicana, sino también a personas provenientes de Cuba, España, Perú, México, Argentina, Brasil, Ecuador, Francia, Venezuela, Colombia, Canadá, Chile, Paraguay, Puerto Rico y Uruguay. En total fueron 22 los países representados en el evento, según informó la UNAH.
El rector de la universidad hondureña y presidente del Consejo Universitario Centroamericano (CSUCA) [2], Francisco Herrera Alvarado, se mostró profundamente agradecido con todos los que hicieron posible el desarrollo del Congreso. Herrera destacó cómo este pasó a la historia como la primera gran actividad de las universidades centroamericanas realizada en un contexto de pandemia.