Investigadores del Campus Tecnológico Local San Carlos [2] indagan las motivaciones y satisfacciones de los visitantes, nacionales y extranjeros, en los principales polos turísticos de nuestro país. Una primera etapa de esta investigación se centró en el Parque Nacional Volcán Arenal y en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Caño Negro.
Los máster Ana Gabriela Víquez Paniagua y Allan Pérez Orozco, de la Escuela de Administración de Negocios [3], están colaborando con investigadores ecuatorianos para analizar las motivaciones del turismo. Esa información sirve tanto para acciones de mercadeo, como para mejorar la atención a los visitantes.
¿Qué espera el turista cuando visita un parque nacional? ¿Volvería o recomendaría el sitio? Son algunas de las preguntas que contestó este estudio y el principal hallazgo es que no todas las personas quieren lo mismo. Las motivaciones varían significativamente, de acuerdo a las condiciones sociodemográficas.
“Uno de los principales resultados es que el turista sí se va satisfecho con la riqueza natural que encuentran en los parques, también que tenemos una base de datos que compartimos con las autoridades de estos parques para que conozcan más de los intereses de los visitantes“, destacó Víquez.
Tanto en Caño Negro como en Arenal, descubrieron que los turistas jóvenes se motivan más por el “auto desarrollo”. Mientras que a los de mayor edad y de más bajo ingreso económico les gusta más compartir con familia y amigos.
Por otra parte, los investigadores encontraron que los turistas con bajos niveles de escolaridad se sienten más motivados con la “novedad” y están más satisfechos con la visita, por lo que están más dispuestos a recomendar el lugar.
También hay diferencias en las motivaciones de los turistas nacionales y los extranjeros, pues mientras que los foráneos adujeron tener interés en conocer cultura y naturaleza; el principal incentivo de los costarricenses es compartir con seres queridos.
“Aunque sea el mismo sitio, cada turista tiene cosas distintas en la mente cuando visita el lugar. Por ejemplo en la Fortuna, vamos a encontrar gente más jóven que va querer lanzarse de un cable a 60 kilómetros por hora, o gente mayor que lo que quiere es relajarse en las aguas termales”, explicó Pérez.
Para llegar a esas conclusiones se aplicaron cerca de 350 encuestas, con ayuda de estudiantes de Administración de Empresas, en Arenal y Caño Negro.
El estudio parte de una investigación hecha en Ecuador, con visitantes de zonas protegidas del país suramericano. Investigadores de ese país visitaron el país en 2018 y propusieron a Víquez y Pérez replicar la investigación en Costa Rica.