“Más del 70% de las legumbres que se consumen en Costa Rica son cultivadas en Cartago, siendo las más importantes la cebolla,  la papa,  la zanahoria y  la lechuga”.

Ese fue el hecho del que parte la máster Noemi Quirós, coordinadora del Centro de Investigación y de Servicios Químicos y Microbiológicos (Ceqiatec) [2] del TEC para señalar la importancia de la capacitación para los agricultores de Tierra Blanca y Llano Grande de Cartago, que brindaron recientemente profesores del Tecnológico de Costa Rica (TEC) [3], así como expertos del Ministerio de Agricultura y Ganadería [4] (MAG) [4] y del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) [5]; todo mediante el financiamiento de la Municipalidad de Cartago [6]. 

Con el nombre de Programa de Educación Técnica a Agricultores (Procagri), esta opción de aprendizaje permitió a los trabajadores de la tierra de la zona norte de la provincia, incrementar su conocimiento en las buenas prácticas agrícolas para la protección del agua y el medio ambiente.

Aplicación de fertilizantes, reglamentación nacional sobre recurso hídrico, mejoras en protección del ambiente y optimización de recursos económicos en las prácticas agrícolas. Ese fue parte del contenido de los cursos del Programa, que se impartió semanalmente desde julio hasta noviembre en un total de 14 sesiones.

El Ceqiatec en el Campus Central del Tecnológico, las instalaciones del MAG en Cartago y el Parque Ambiental Río Loro en Ochomogo funcionaron como sede para que 25 participantes cursaran satisfactoriamente este Programa, que tuvo el apoyo de las escuelas de Química, Agronegocios, Agronomía y la Vicerrectoría de Investigación y Extensión del TEC.

Además, para uno de los módulos impartidos por el MAG, se contó con la participación del Centro de Investigación en Contaminación Ambiental de la Universidad de Costa Rica (UCR) [7] y el Centro de Agricultura Orgánica del INA [5].

Coordinación entre Instituciones: la clave del éxito

Desde jóvenes aprendices hasta experimentados agricultores se vieron beneficiados por Procagri. Debido a que la iniciativa fue financiada por la Municipalidad de Cartago, resultó totalmente gratuita para los beneficiarios.

"La Municipalidad dentro de su plan de educación y en aras de proteger la calidad del agua que suministra, implementó un programa para capacitar a los agricultores de Tierra Blanca y Llano Grande, para reducir los niveles de nitratos; ya se ha trabajado con los usuarios el buen uso del agua, para que ahorren y cuiden este recurso, ahora también trabajamos con los agricultores para cuidar las zonas de recarga que abastecen el acueducto”, explicó Rolando Rodríguez Brenes, alcalde del Cantón.

Según el criterio de varios participantes, la unión de tantas entidades para realizar este Programa resultó muy interesante y les permitió obtener un gran aprendizaje.

“La capacitación fue excelente. Me sirvió mucho mejorar lo que conozco sobre siembra y uso del agua. Como mujer agricultora esta fue una experiencia muy valiosa y ahora estoy emocionada por practicar lo aprendido”, aseguró Flor María Mora, de la Asociación de Mujeres Produciendo y Conservando, de Tierra Blanca.

Por su parte, para Hebert González, lo más importante fue lo aprendido sobre el cuidado del agua. También, resaltó la coordinación que hubo entre el TEC y los demás actores. “Gracias a esa excelente alianza, todos ganamos un conocimiento muy grande”, aseguró este productor independiente de Llano Grande.

La máster Quirós estuvo a cargo de organizar el trabajo del TEC en este Programa. “Fue importante haber funcionado en conjunto con otros actores de mucha relevancia en la agricultura a nivel nacional. Se vio mucha motivación de parte de todos los participantes y hasta se maneja la posibilidad de dar continuidad al Programa”, comentó la coordinadora del Ceqiatec.

La graduación del Procagri tuvo lugar el 23 de octubre en el Parque Ambiental Municipal Río Loro en Ochomogo, donde los graduados recibieron un certificado avalado por el  Instituto Municipal de Educación de Cartago, lo que le dio mayor acreditación al tiempo que le dedicaron en cada módulo.

Además, se aprovecharon las instalaciones del Parque para observar y aprender sobre las nacientes de agua que posee.

Se espera que a partir de 2019 se pueda dar seguimiento al Programa, ofreciendo tanto una segunda parte como una nueva edición del contenido impartido por primera vez este año.