Durante este 2018, investigadores de la Escuela de Ingeniería Forestal [2], del Tecnológico de Costa Rica (TEC) [3], empezarán a sustituir por especies autóctonas los árboles exóticos plantados en el sector de Prusia, en el Parque Nacional Volcán Irazú [4].
La corta de árboles en un área protegida es una labor poco frecuente en nuestro país, ya que por lo general son sitios de bosque y no de plantaciones, como es el caso de algunas áreas del Sector Prusia. El objetivo es cosechar los árboles de especies exóticas –ya aventajados y en plantaciones forestales sin manejo alguno–, para sustituirlos por especies representativas y propias de la región, que se adapten mejor y que a su vez promueven la creación de un hábitat idóneo para la fauna local.
Por lo tanto, se trata de un plan piloto no solo para Prusia, sino que para todo el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) [5]. Este no es el único parque nacional donde especies que no deberían estar ahí quedaron dentro de los límites del área protegida, y, bien manejado, un proceso de restauración puede traer grandes beneficios a los ecosistemas de nuestro país.
“Prusia es un sitio muy particular, es una zona de vida única en el país, lo que la reviste de una gran importancia. Aquí, lo que encontramos es una evidente necesidad de restaurar el ecosistema, y buscar un ambiente más cercano a lo que esto era naturalmente antes“, explica Alejandro Meza, director de la Escuela de Ingeniería Forestal del TEC y coordinador del proyecto de investigación bajo el cual se coordinan los esfuerzos para restaurar el bosque nativo de Prusia.
Este plan encierra la intención del Sinac de que el Parque Nacional Volcán Irazú cumpla con los principales objetivos de un Área Silvestre Protegida:
- Conservar ambientes naturales representativos y ecosistemas más frágiles.
- Salvaguardar la diversidad genética.
- Proteger y mejorar las zonas acuíferas y cuencas hidrográficas.
“Se busca restaurar el sitio con ecosistemas nativos que pueden ser más estables, son más eficientes y además son más amigables para la flora y la fauna nativa”, ahonda Arnulfo Díaz, encargado de Desarrollo Forestal en la subregión Cartago por parte del Sinac.
El caso más parecido a lo que se quiere plantear para Prusia es el del Parque Metropolitano La Sabana, en San José, donde se cambiaron árboles exóticos por especies nativas de Costa Rica y eso propició un incremento del número de aves que visitan la zona.