“RidgeRun Engineering” es el nombre de la empresa de capital estadounidense -con oficinas de ingeniería en Costa Rica- que desde hace algunos años se encuentra apoyando la investigación del Tecnológico de Costa Rica (TEC) [2] en distintos proyectos de varias carreras, como Ingeniería en Computación e Ingeniería Electrónica.
En esta ocasión, el área académica de Ingeniería en Computadores [3] se está viendo beneficiada desde mitad del año anterior por una serie de aportes y financiamientos que arrojaron como el más reciente aporte, la donación en el mes de marzo de ocho tarjetas NVIDIA Jetson TX2.
Los dispositivos mencionados anteriormente son sistemas embebidos de alto desempeño y tecnología de punta del tamaño y forma de una pequeña tarjeta de crédito. Estos pequeños supercomputadores se insertan en aparatos de mayor complejidad, como automóviles, drones, o maquinaria, para dotarlos de funcionalidades inteligentes.
El Laboratorio de Procesamiento de Imágenes y Señales (denominado SIP-Lab por sus siglas en inglés) es el punto en donde dicha tecnología se está utilizando.
Este espacio se encuentra ubicado en las instalaciones del nuevo edificio de la Escuela de Ingeniería Electrónica y en el mismo, estudiantes y profesores investigan sobre algoritmos de detección de movimiento en vídeos. Los equipos donados están además siendo utilizados en cursos avanzados de la carrera de Ingeniería en Computadores para promover el fortalecimiento de la enseñanza en dichos temas.
Con casi un año de desarrollo, el proyecto llamado “dispTEC2” busca perfeccionar la detección de movimiento en cámaras no estacionarias. La empresa RidgeRun Engineering financia este trabajo, asumiendo el pago a profesores, estudiantes asistentes y facilitando el equipo. El TEC aporta el conocimiento existente, instalaciones y el desarrollo de nuevas ideas.
“Las tarjetas que nos donaron tienen tecnología que permite usar algoritmos más pesados de inteligencia artificial y procesamiento de imágenes que de otro modo estarían restringidos a estaciones de trabajo o computadoras de escritorio”, explicó el ingeniero Pablo Alvarado, docente del área de Ingeniería en Computadores.
Este trabajo permitirá que las cámaras sean capaces de identificar por separado el movimiento de determinado cuerpo o elemento dentro de un vídeo, aun cuando toda la escena en conjunto se mueve. Esta funcionalidad sería aprovechada en cámaras de seguridad, coberturas deportivas, trasmisiones de eventos e incluso hasta en aplicaciones en biología (movimiento de especímenes en análisis).
Se espera que hasta finales de este año se siga trabajando en el proyecto y que en ese momento se puedan obtener los resultados. De igual manera, según comentó Alvarado, es muy probable que el tiempo del convenio se amplíe. “Lo interesante de proyectos así, es que están abiertos. Dependiendo de los resultados parciales se puede ampliar”, finalizó.