David Campos se convierte en un ejemplo de perseverancia, lucha y superación, al ser el primer ingeniero no vidente graduado en Costa Rica.
Este joven oriundo de las Musas de San Ramón de Alajuela, hijo de agricultores y el quinto de siete hermanos subió al escenario acompañado por su padre, Rodrigo Campos de 67 años.
Todo ello mientras se declaraban las siguientes palabras:
"Él abre el camino para que otras personas con su condición y que sueñan con ser ingeniero lo consigan. Además, en su paso por nuestra comunidad se le agradece haber impulsado a que el TEC sea una institución más inclusiva y accesible".
David recibió su máximo galardón: Ingeniero en Computación graduado del Tecnológico de Costa Rica [2] (TEC).
"Me siento tan orgulloso de mi hijo. Aún recuerdo cuando me dijo que quería entrar al TEC. Con mucho esfuerzo le conseguimos un apartamento. Yo vine, lo dejé y, en todo el regreso hasta San Ramón lloré. Mi esposa y yo estábamos muy asustados", recordó su padre un agricultor de café y de caña de india.
- David, ¿tuvo momento duros?
"Muchos..."
- ¿Qué lo hacía seguir a delante?
"Yo quería volar...
Mi sueño de niño era ser piloto de aviación. Recuerdo que solía buscar tablas y clavos para construir mis propios aviones. Nunca había visto uno, pero los construía a como yo me los imaginaba. Por supuesto, en esa época no tenía muy claro que implicaba ser ciego, pero yo quería volar".