Aunque las percibamos como algo común cada fin de semana en las cercanías del parque, las reconocidas “Ferias del agricultor” que se realizan alrededor del país son en sí mismas, estructuras de mercado que no son habituales a nivel mundial.
El hecho de que estén avaladas y respaldadas por la legislación nacional, hace que los beneficios para vendedores y compradores estén garantizados en varios aspectos. El origen de las “ferias” como tales, data de finales de los años setenta, cuando se creó la Ley 8533 del Sistema Nacional de Ferias de Agricultor.
Debido a este ejemplar nivel de organización, actualmente las ingenieras María Fernanda Jiménez, Marianella Gamboa y Laura Brenes - investigadoras de la Escuela de Agronegocios del Tecnológico de Costa Rica (TEC) [2]- se encuentran elaborando la “Guía para establecimiento de ferias del agricultor eficientes: prácticas exitosas para ligar sistemas agroalimentarios saludables con dietas urbanas más sostenibles”.
Este documento está siendo trabajado a petición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura [3] (FAO en sus siglas en inglés) y pretende funcionar como un manual mediante el cual los demás países de la región latinoamericana puedan tomar el ejemplo de Costa Rica y establecer en ellos estilos de mercados similares.
De manera puntual y según ejemplificaron las encargadas de la tarea, las fortalezas que han logrado identificar en las ferias del agricultor van relacionadas con la cercanía que existe entre el productor y el cliente, lo cual representa una mejor oportunidad de hacer valer todas las garantías que el apoyo gubernamental determina.
“La calidad de los productos es muy buena y eso lo atribuyo al apoyo del Gobierno. Hay que reconocer que el Estado sí trabaja por los productores y consumidores, ya que la legislación los obliga a tener productos de calidad, sea donde sea”, aseguró María Fernanda Jiménez, quien agregó que los lineamientos en el país están establecidos y que los requisitos mínimos son de un aceptable nivel.
La manera en que se han hecho los estudios y recopilado datos para esta guía, va desde la aplicación de encuestas, observación y toma de anotaciones sobre las buenas prácticas en estos espacios. “Entre los aspectos evaluados destacan: las razones de comercialización, preferencia de los consumidores por este mercado y no otros, calidad del producto, disponibilidad, precio y cercanía”, agregó la ingeniera Marianella Gamboa.
La realización de este proyecto inició en enero del presente año y se espera que la Guía sea entregada en noviembre para que los resultados sean publicados por la FAO. “El proyecto se encuentra ahora en etapa de análisis. Se está haciendo el modelado de la información mediante análisis estadísticos, comparaciones y producción textual. También se está en detalles sobre el diseño de la guía”, finalizó la investigadora Brenes.
Además de las tres ingenieras, en el proyecto participan estudiantes y egresados de la Escuela de Agronegocios del TEC.
Puede acceder a la Ley 8533 del Sistema Nacional de Ferias de Agricultor haciendo clic aquí [4].